domingo, 8 de abril de 2018

VIDA

Mi vida son años que he empeñado en hacer algo,
algo en lo que pienso que vale la pena o eso espero;
mi tiempo, lo que he invertido en lo que creo que valgo,
mi afán, dedicarme a lo que me gusta y no es cocinero. 

Ni un segundo paro, ni un segundo respiro,
--ya conocéis mi poco tiempo, solo para el almuerzo--,
mas si deseo algo hay que luchar para conseguirlo,
y dediqué todo lo que tengo, todo mi esfuerzo. 

Hay en mis venas sed de sonidos, de melodía,
pero no solo de eso, sino de música,
y, hago más que un adolescente que dormía, 
soy, en el buen sentido de la palabra, músico. 

jueves, 26 de octubre de 2017

Frankenstein del siglo XXI Capítulo 5

Hola Luis, como te conté en el anterior e-mail dejé a la criatura libre pero antes de irse me dijo: -Muchas gracias pero, ¿cómo la conquisto sin que se ría de mí?- Entonces decidí ayudarle y fuimos a dar un paseo bajo la luna ya que eran las tres de la mañana y la chica estaría dormida. En ese momento le conté de dónde procedía y también le enseñé cómo podría conquistarla. 


Se nos pasó el tiempo volando cuando de repente ya había amanecido,  y  fuimos en busca de la chica. Estuvimos dos horas buscándola, dando vueltas por todos los lados hasta que nos rendimos y nos sentamos frente al Römer, y justamente allí estaba ella con su grupo de amigas, así que empujé al monstruo para que se dirigiese a ella.

No me quedé fijamente mirándoles porque era un momento un poco íntimo, entonces se me acercó la criatura con la chica para agradecerme el esfuerzo que hice para despertarle y enseñarle a enamorar. Mientras regresaba a casa, porque ya se estarían preguntado que qué hacía a las 7:30 de la mañana fuera de casa, me llegó un mensaje del invento, era una foto de ellos juntos. En ese momento me di cuenta de que hice una buena acción, y me daba igual que se enfadara Rolf porque me reñiría en alemán…y no le entiendo jajaja.


Bueno, esa es la historia de mi viaje a Alemania durante este verano. ¿Qué tal tu verano?

Claudia.

Frankenstein del siglo XXI Capítulo 4



Hola Luis, ¿por dónde iba…? Sí, le seguimos y efectivamente nos le encontramos en el ayuntamiento, pero antes de ir a por él, nos escondimos tras la estatua que hay delante del Römer para ver cómo se supone que quería relacionarse con la gente. Nos le encontramos observando fijamente a un grupo de chicas pero en especial a una chica de pelo rubio corto, delgada, con los ojos claros, y lo más importante, ¡tenía un iPhone!


Vimos que la criatura hizo lo que dijo Rolf, se cambió la cara y se puso la de un chico muy guapo con una expresión romántica. Se acercó a la chica y ella miró hacia arriba pero no se asustó, le dijo: –Tú me acabas de seguir en Instagram,  ¿no?- En ese momento me di cuenta de que la criatura no era mala, entonces le dije a Rolf: -¿Y si le dejamos libre?, igual se llega a enamorar y nunca se sabe, igual se casan…- Rolf me contestó que era muy peligroso, llamó al monstruo y se lo llevó a la fuerza a casa.


Al llevárselo a casa lo apagó aunque yo estaba en contra, pero era su invento, así que lo hizo. Esa noche no podía dormir pensando que el invento podría haberse enamorado y tener su propia vida , ¿y qué hice? Fui a escondidas a la habitación de mis padres, pero sin meter ruido porque estaban durmiendo, le di a al botón de detrás del folio y se giró la pared. Volví a encender al monstruo pero con el volumen muy bajo para que no despertase a nadie, lo primero que dijo fue: -¿Dónde está @itslaura35?- y yo le respondí que fuese a buscarla y que era libre, pero que no se metiera en problemas.


Mañana te seguiré contando,

Claudia

Frankenstein del siglo XXI Capítulo 3



Hola Luis, te voy a seguir contando lo que pasó después de todo lo que te conté en el anterior e-mail. 
Después de quedarme en shock, inmediatamente cogí la tablet que tenía a mi lado y se la coloqué en la cabeza a la máquina. Rolf enchufó todo a un monitor en el que tenía varias fotos de caras de gente, pero antes de nada me dio unas gafas anti-rayos y encendió la criatura tecnológica, encendió todo y escogió una cara de un hombre.
En ese momento tenía mucho miedo porque no sabía qué haría el invento, pero, en cuanto se encendió, la cara del hombre pestañeó y nos dijo: -¿SÍ,HOLA,PROBAAANDOOO?- Rolf bajó el volumen –Hola, seguidme en Instagram y en twitter @frankiet02, pero, ¿quiénes sois, os sigo?- Rolf le contestó que era una especie de hombre-máquina, y le dijo cómo cambiar de cara, en ese momento el monstruo le miró raro y le dijo que necesitaba salir a la calle para seguir a gente en las redes sociales, pero mi tío abuelo no le dejó, antes tenía que hacer pruebas para que no se estropee, ¿y qué hizo el invento? No le hizo caso, salió rompiendo todo lo que se le cruzaba por el medio, sean paredes o un edificio entero.

Nosotros no reaccionamos porque no sabíamos qué hacer, no sabíamos si seguirle o apagarle pero Rolf se dio cuenta de que le instaló una memoria muy capacitada como para ser lo bastante listo, y robó el monitor que le controlaba y todas sus baterías.

Yo sí hice algo, me quité las gafas y giré la pared para volver al chalet, fui corriendo hacia mi móvil y recordé el usuario del monstruo, así que le di a seguir, vi su última foto que subió más o menos hacía dos minutos y llamé a mi tío abuelo para seguir a la criatura, ya que en la foto se veía que estaba cerca del ayuntamiento.

Mañana te cuento más que me voy a dormir, adiós,

Claudia





Frankenstein del siglo XXI Capítulo 2


Hola Luis, bueno, se me olvidó contarte ayer que me enamoré de Alemania, en concreto de Frankfurt. El ayuntamiento que se llama Römer es precioso, tiene cierto parecido a unas casas antiguas de colores primarios muy llamativos, y me dijo Rolf que allí se casó él y uno de sus hijos también.

En ese momento mi tío abuelo me empezó a contar cosas muy interesantes de su vida, de sus inventos fallidos y de sus proyectos. Me confesó: -Tengo una gran idea pero necesito a alguien en quien confiar para contarle mi proyecto y que no se entere nadie-, sí, pensó en mí.

Cuando regresamos al pedazo de chalet me llevó directa al cuarto de mis padres. No entendí qué hacíamos allí, pero levantó ese folio, ese que tanto me llamó la atención, el folio de la silueta de hombre. Lo levantó y…bajo él apareció un botón secreto al que le dio. Lo más raro no era que hubiese un botón, si no que al darle se dio la vuelta la pared y aparecimos en una especie de laboratorio o fábrica o cualquier cosa, pero ¡yo estaba allí!

Me encontré muchos cables colgando de algo parecido a una máquina y me comentó: -Esta es mi idea, es una máquina con forma de hombre.- ¡Yo tenía razón! –Voy a intentar crear una especie de hombre al que todo el mundo adore y ya que se lleva mucho eso de las tecnologías quiero que me ayudes a instalarle una tablet en vez de cara, también y si no te importa, me harías un gran favor si le  instalas todas las redes sociales.- Le conteste asintiendo con la cabeza porque estaba flipando con el invento que tenía delante. Tenía todo lo que tiene un hombre pero además, tenía dos móviles implantados en los brazos y claramente no tenía cara porque eso lo tenía que poner yo, que miedo…
Mañana te cuento más,

Claudia

Frankenstein del siglo XXI Capítulo 1


Hola Luis, hace mucho que no hablamos y he pensado que estaría bien que empezásemos a mandarnos e-mails como este,  y así podemos contarnos qué hemos hecho en verano y volver a tener un poco más de contacto.

La semana pasada me fui de viaje a Alemania con mis padres y mi hermana, Carla. Decidimos ir ya que mi tío abuelo es alemán y yo nunca he ido a visitarle allí y nunca había pisado ese país. Cuando llegamos me encontré un chalet tan grande que pensé que hasta el presidente vivía allí. Tenía un enorme jardín lleno de flores y árboles.

¿Y mi tío abuelo? Mi tío abuelo va a cumplir 80 años, se llama Rolf y es un hombre al que le apasiona la música y todo tipo de tecnologías, es un hombre muy alto con el pelo castaño canoso, de ojos marrones y con gafas de metal. También conocí a mi tía abuela, que aunque es española lleva allí toda la vida, y a sus hijos (todos alemanes), sabían hablar español pero con dificultad.

Carla y yo nos instalamos en una habitación que tenía el tamaño de nuestra casa, tenía dos camas de matrimonio, dos armarios de unos tres metros, y muchos carteles de conciertos y de compositores. La habitación de mis padres tenía varios folios pegados en la pared con diseños de máquinas y cosas parecidas a unos teléfonos móviles, me extrañó ver una máquina con una silueta parecida a la forma del ser humano pero, no le di importancia porque mis padres ya me avisaron de que Rolf era un hombre raro y con muchos secretos.

Bueno, siento tener que dejarte ahora, pero tengo que ir a la casa de una amiga para terminar un trabajo de lengua para el instituto.

Hasta mañana,

Claudia





jueves, 5 de octubre de 2017

Descripción literaria de "mesa"

Ahí estaba, solo, sin nadie, solo él con un bolígrafo y un papel… todo puesto en su mesa, esperando la creatividad, la imaginación o cualquier cosa. De repente cae rendido y empieza a soñar, se imagina en un bosque lleno de flores sin ningún problema, pero se le acerca un perro, un perro que le mira con un gesto de tristeza y en ese momento el niño despertó y empezó a escribir una historia. La historia trataba de un perro, una historia triste pero con final feliz y además de eso empezó a dibujar y a dibujar, hasta conseguir un dibujo exacto del perro con el que soñó, con el que le volvió la imaginación. La mesa es un sitio en el que escribes, pintas, sueñas y creas.